
(Algo de Memoria Histórica en esta fecha)
Por Mau Montero
La Paz – Bolivia… jueves por la tarde, 15 de enero de 1981; efectivos paramilitares de la dictadura de Luis García Meza encontraron, torturaron sanguinariamente y luego asesinaron a ocho miembros de la dirección nacional de un movimiento de izquierda en ese entonces…
30 años transcurrieron… sin perdón, sin olvido y sin justicia…
Paciencia dijeron algunos, el Presidente dijo que nos jodamos todos los que buscamos justicia, no importa hace una, dos o tres décadas o los que buscan justicia toda su vida…
todos tendremos que seguir esperando, pues ahora la institución militar esta absuelta de pecado pues los gorilas sólo recibían órdenes de Kin Kong…
Por Mau Montero
La Paz – Bolivia… jueves por la tarde, 15 de enero de 1981; efectivos paramilitares de la dictadura de Luis García Meza encontraron, torturaron sanguinariamente y luego asesinaron a ocho miembros de la dirección nacional de un movimiento de izquierda en ese entonces…
30 años transcurrieron… sin perdón, sin olvido y sin justicia…
Paciencia dijeron algunos, el Presidente dijo que nos jodamos todos los que buscamos justicia, no importa hace una, dos o tres décadas o los que buscan justicia toda su vida…
todos tendremos que seguir esperando, pues ahora la institución militar esta absuelta de pecado pues los gorilas sólo recibían órdenes de Kin Kong…
Vaya izquierda a la que le hemos encomendado la tarea del proceso, ¡justicia para todos!, ¡ah! pero con los del partido y los milicos no se metan, después... todos pueden ser perseguidos por la ley anticorrupción, pero por si aca no existe la ley anti-impunidad o sea que no le echen la culpa a nadies. Ah! Pero eso sí, que la ley anticorrupción se llame Marcelo Quiroga Santa Cruz, eso suena bien, a ese lo mataron antes del 15 de enero del 81, a ese lo limpiaron durante el golpe militar del 17 de julio del 80. Cuando se promulgue la siguiente ley anti-impunidad, la llamaremos Luis Espinal, claro… suena emblemático, y como en este país se promulgan y derogan leyes como si nada, ¡super!, ah pero eso sí… con los del partido y los milicos no se metan, con ellos el trato es distinto.
Y me hablan de paciencia… ¡Paciencia!
Otra vez la palabra paciencia; PACIENCIA… ¿paciencia hasta cuando?
¿Hasta cuando el repique con ecos de cobardía y sombra?
¿Hasta cuando la insensata mentira al pueblo?
¡Paciencia! Jajajaja… dirán ¡hipocresía!
Para vivir de nuevo no me queda otra cosa que recordar el pasado para otros… muerto
Pero que en mi sigue latente, que en mi reafirma la aurora, recordándome a cada instante
Que no han matado a los hombres cuyas voces no han sido enterradas,
Y que al contrario, siguen vigentes, presentes
Voces que serán siempre ahora y duelo… conciencia y recelo
En la mente del pueblo que enraíce “libertad y lucha” en el corazón de su gente…
Ahí, ahí están entre nosotros Ricardo Navarro, Artemio Camargo, José Reyes, Gonzalo Barrón, José Luis Suárez, Arcil Menacho, Ramiro Velasco, Jorge Valdivieso…
“En aldea de este tiempo se me incrusta el desaliento
Y en una vigilia asoman la muerte y el desconcierto
Y en una vigilia asoma ¡ay!... la historia… el polvo del tiempo
La historia el polvo del tiempo de otro enero en dictadura
Historia que no solvento si la siento aún inmadura
Si el alma se vuelve dura, la vida es raudal desierto
Cuando me pierdo en el tiempo, me hundo, me encierro y los sueño
Y uso estas largas horas pa perderme en su recuerdo
Y uso esta largas horas pa anidarme en sus intentos…
Y grito a estas largas horas… que los héroes no están muertos.
Pa anidarme en sus intentos traigo innatas melodías
Y en una pupila asoma la imagen de esos días
Y en una pupila asoma ¡ay!... su presencia escondida
Su presencia que a escondidas con arduo fervor florezco
Gritando a estos tristes vientos la justicia sea encendida
Gritando a estos tristes vientos cese ya esta agonía…
Cuando me pierdo en el tiempo, me hundo, me encierro y los sueño
Y uso estas largas horas en mi homenaje al justo empeño
Y uso estas largas horas… ocho nombres en mi recuerdo…
Estas ocho vidas junto a la de Luis Espinal, Marcelo Quiroga Santa Cruz,
Carlos Flores, Gualberto Vega entre muchos otros, no han sido reivindicadas
Por la supuesta democracia que vivimos ¿hace cuanto?
La ingratitud política se ha convertido en una aliada de la impunidad
Ignorando a quienes debieran imitar.
Sin perdón… sin olvido y sin justicia… han pasado 30 años... desde la Masacre de la calle Harrington.
Y me hablan de paciencia… ¡Paciencia!
Otra vez la palabra paciencia; PACIENCIA… ¿paciencia hasta cuando?
¿Hasta cuando el repique con ecos de cobardía y sombra?
¿Hasta cuando la insensata mentira al pueblo?
¡Paciencia! Jajajaja… dirán ¡hipocresía!
Para vivir de nuevo no me queda otra cosa que recordar el pasado para otros… muerto
Pero que en mi sigue latente, que en mi reafirma la aurora, recordándome a cada instante
Que no han matado a los hombres cuyas voces no han sido enterradas,
Y que al contrario, siguen vigentes, presentes
Voces que serán siempre ahora y duelo… conciencia y recelo
En la mente del pueblo que enraíce “libertad y lucha” en el corazón de su gente…
Ahí, ahí están entre nosotros Ricardo Navarro, Artemio Camargo, José Reyes, Gonzalo Barrón, José Luis Suárez, Arcil Menacho, Ramiro Velasco, Jorge Valdivieso…
“En aldea de este tiempo se me incrusta el desaliento
Y en una vigilia asoman la muerte y el desconcierto
Y en una vigilia asoma ¡ay!... la historia… el polvo del tiempo
La historia el polvo del tiempo de otro enero en dictadura
Historia que no solvento si la siento aún inmadura
Si el alma se vuelve dura, la vida es raudal desierto
Cuando me pierdo en el tiempo, me hundo, me encierro y los sueño
Y uso estas largas horas pa perderme en su recuerdo
Y uso esta largas horas pa anidarme en sus intentos…
Y grito a estas largas horas… que los héroes no están muertos.
Pa anidarme en sus intentos traigo innatas melodías
Y en una pupila asoma la imagen de esos días
Y en una pupila asoma ¡ay!... su presencia escondida
Su presencia que a escondidas con arduo fervor florezco
Gritando a estos tristes vientos la justicia sea encendida
Gritando a estos tristes vientos cese ya esta agonía…
Cuando me pierdo en el tiempo, me hundo, me encierro y los sueño
Y uso estas largas horas en mi homenaje al justo empeño
Y uso estas largas horas… ocho nombres en mi recuerdo…
Estas ocho vidas junto a la de Luis Espinal, Marcelo Quiroga Santa Cruz,
Carlos Flores, Gualberto Vega entre muchos otros, no han sido reivindicadas
Por la supuesta democracia que vivimos ¿hace cuanto?
La ingratitud política se ha convertido en una aliada de la impunidad
Ignorando a quienes debieran imitar.
Sin perdón… sin olvido y sin justicia… han pasado 30 años... desde la Masacre de la calle Harrington.